El periódico digital de Asturias ‘El Comercio.es’ nos sorprende con una publicación que podría ser digna de toda una primera plana el 28 de Diciembre, día de los inocentes: ¡adolescentes en China sacando a pasear verduras!
Y es que se ha puesto de moda en China que la población adolescente salga a pasear con verduras, a las que atan con su correa y arrastran por la ciudad como si de mascotas se trataran.
¿Por qué hacen esto? ¿A qué se debe que tirando de la correa arrastren un repollo o una lechuga iceberg por la ciudad? ¿Hay alguna empresa detrás de este fenómeno o es otra moda viral?
Al margen del febril fenómeno de la moda (recordareis el planking, owling, batmaning, teapotting, etc) la juventud china afirma que quiere superar la depresión y la soledad en la que se encuentra inmersa...
¿Cómo superar la depresión y la soledad?
Si bien es sorprendente el ajuste creativo que ha tenido esta población para tratar de superar su soledad y depresión, también considero que es muy preocupante que haya sido la población juvenil china la que ha salido a la calle a realizar alguna actividad (extraña, pero actividad al fin y al cabo) porque se sienta deprimida y sola. La juventud. La que está perennemente conectada en diversas redes sociales. Sola. Deprimida.
¿Y qué beneficios físicos puede traer arrastrar un repollo o una lechuga iceberg? Hacerlo en sí, poco. Quizás que la persona incremente su actividad física al tener que caminar por la calle en lugar de estar sentada en su sofá o silla de escritorio.
PERO la clave está en los beneficios psicológicos de arrastrar esa verdura. Para poder estar en un lugar en concreto y a una hora determinada esas personas han tenido que interactuar entre ellas. Han tenido que decidir si un sitio u otro, si es accesible llegar a ese punto con uno u otro medio de transporte, si la hora a la que se efectúa le viene mejor a quienes dicen que van a ir o la cambian... Solamente esto es ya terapéutico.
Su soledad es menos soledad al estar hablando online con otros y otras adolescentes que también quieren participar. Pero además, al llegar al punto elegido con toda su depresión (y su repollo o lechuga) verán a otra persona en su misma situación y quizás algo muy pequeñito dentro de si le haga esbozar una cuasi imperceptible sonrisa. Terapéutico.
Y mientras están en la plaza paseando a sus verduras, observarán las verduras de sus semejantes y hasta les preguntarán cómo lo hacen para que no pierdan sus hojas o no se manchen con la velocidad con la que su repollo se manchó. No son conscientes pero también es terapéutico.
¿Qué han descubierto? Al margen de que la verdura no se moverá por si misma, han dado con la terapia para la depresión desarrollada sobre bases contextuales y funcionales llamada "activación conductual". Es decir, están incrementando conductas que hagan probable el contacto con las contingencias ambientales reforzantes y produzcan, a su vez, cambios en los pensamientos, el humor y la calidad de vida.